viernes, 27 de diciembre de 2013

SABADO 28 DE DICIEMBRE FINAL DEL PROGRAMA RADIAL “COMUNICACIÓN CON IDENTIDAD” 2013




 Por Equipo 
Xitta Lequy
(La Voz del Pueblo)


Xitta Lequy: ¿Hola David desde hace cuánto hacen Comunicación con Identidad?

David Torres: Lo hacemos desde hace 4 años, 1 año en FM Natura 99.3 (hoy Fabrica de Música) iniciamos con varios hermanos de diferentes Pueblos; Diaguitas, Kollas, Tastiles, Lules, etc. Tuvimos la fuerte colaboración de la gente de la radio, una familia comprometida con el arte y las luchas populares. Poco a poco fuimos mostrando que si bien somos  parte de lo que hoy se llama popular, los Pueblos tenemos elementos culturales que nos hacen diversos y únicos culturalmente provenimos de sociedades con un fuerte sentido colectivo social y político. En fin demostramos que los Pueblos Originarios tenemos nuestra identidad que no es popular sino que a nuestro entender la cultura que heredamos y construimos todos los días lo que nos muestra como sociedades preexistentes a los estados nacionales, provinciales incluso al concepto “popular” etimológicamente y comunicacionalmente hablando.
Hace tres años nos organizamos el Pueblo Lule de Salta con La Comunidad Juan Calchaquí del Pueblo Diaguita de Salta UPND, ambos miembros del ENOTPO para realizar un convenio con LRA 4 Radio Nacional Salta AM 690, donde informar la voz de los Pueblos Originarios, haciendo practico uno de los derechos conquistados por la lucha indígena.


XL: ¿De dónde surge el nombre “Comunicación con identidad”?

DT: Venimos a tomar la posta de una lucha histórica, heredamos la causa si se puede decir.
El nombre específicamente proviene de un proceso de lucha ancestral, que se expresó en momentos cuando se reformaba la ley de medios de la dictadura, por una más acorde a la democracia. Desde el ENOTPO Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios, entendemos que todo proceso de cambio sobre todo en lo referido a Políticas Publicas y la Legislación debe tener la participación de los Pueblos Originarios como lo expresa la Constitución Nacional en el artículo 75 inc. 19. En ese sentido como organización nos dimos la tarea de proponer un articulado que hiciera posible instrumentar un derecho a la COMUNICACIÓN CON IDENTIDAD, es decir una nueva categoría de medios que expresara en primera persona y desde nuestras cosmovisiones una diversidad de voces, no tan solo culturales si no también políticas, y en los más variados sentidos e intereses que pudieran tener o afectar a los Pueblos y sus comunidades. Básicamente la idea era poner al aire, o mejor dicho en conocimiento de la sociedad no indígena,  la lucha, la representación y la participación política de los Pueblos en la construcción de una sociedad más justa y sobre todo más cercana a la realidad indígena.


XL: ¿Que voces se pueden escuchar  a través de este derecho?

DT: Por empezar aclaro que desde el Pueblo Lule de Salta tenemos nuestra propia forma de hacer Comunicación como la tienen los demás Pueblos. Pero básicamente podríamos sintetizarla en que, más que  poder hablar en nuestros propios idiomas, es llegar  con un mensaje político claro, nunca dejar en  manos ajenas  las decisiones políticas que nos corresponden por ser Pueblos preexistentes, autónomos, y soberanos. Los Pueblos desde hace más de 10 años han abordado un proceso propositivo en dialogo con los estados nacionales y provinciales, dejando atrás pero no de lado la  etapa del reclamo violento.
En ese sentido las decisiones que se toman en las asambleas comunitarias o las asambleas de comunidades que forman un pueblo son las que tienen la legitimidad política y donde reside la identidad de esa decisión ya que se hace desde una cosmovisión y desde una instancia tradicional. Es así que desde estos espacios tradicionales  se aportó a la reforma de la nueva ley de medios, a la reforma, actualización y unificación de los Códigos Civil y Comercial de la Nación entre otros tantos también que se dieron en las provincias.


XL: ¿En qué se diferencia la Comunicación con Identidad de la Comunicación Comunitaria o 
Popular?

DT: En quien la transmite debe ser originario, y que debe  respetar  el contexto donde se emana lo que se va a difundir. Es decir los ámbitos de decisión tradicional de los Pueblos, cambiarle una coma sería una interpretación personal o profesional si se lo quiere adecuar a los formatos académicos, comunitarios o populares. Quien informa debe estar bajo las órdenes o mandatos de sus asambleas u autoridades delegadas. Si bien con lo Comunitario y Popular se comparten muchas demandas históricas, estas carecen de cultural, de lo político con sentido de pertenencia a un territorio ancestral, esta la defensa de la cosmovisión encarnada en el tiempo y espacio, en el equilibrio entre la Comunidad Indígena y el territorio, ese paisaje que surge de la naturaleza y la cultura.
En un punto aparte… han habido muchos hermanos que han perdido la brújula y creen hacer comunicación con identidad, y lo que están haciendo es estereotipar la Comunicación Indígena, poniendo los criterios desde fuera de los Pueblos, a veces atada a intereses individualistas que son contrarios  a lo colectivo como no enseñaron nuestros  abuelos.


XL: ¿Cuáles serían los fines de Ustedes como equipo de Comunicación Indígena?

DT: Visibilizamos la problemática indígena; sobre todo la difusión de la legislación indígena, ya que no se trata de posiciones políticas o de una expresión de deseos, difundimos las leyes que los pueblos han conseguido con años de luchas y que exigimos que se cumplan. Pasando en limpio, cuando hay hermanos desalojados eso es algo repudiable, pero la noticia es que hay un juez que desconoció una ley de orden público de aplicación obligatoria en el territorio argentino, y la consecuencia es un desalojo (la recurrencia de estos fallos debería constituir un delito).
La visibilizacion la hacemos sin perder la cosmovisión de origen,  en lo posible desde los mismos sujeto de derecho o bien las víctimas, protagonistas, etc. en idioma si es posible, porque sería un periodismo común y corriente reflejar lo sucedido aun cuando reflexionemos con hondura si lo hacemos leyendo títulos de diarios o material elaborado en algún soporte que tengamos a mano.
Para llevar a cabo esta tarea nos hemos organizado con hermanos que son delegados por sus pueblos para hacer comunicación, son llamados comunicadores indígenas, su legitimidad está dada por el respeto de las decisiones asamblearias y de sus autoridades, lo opuesto a esto son hermanos sin representatividad ni legitimidad como comunicadores. Al menos para informar en nuestro programa.


XL: ¿Quienes integran actualmente “Comunicación con Identidad”?

DT: Desde los inicios contamos con Juan José Lopez de la Comunidad Juan Calchaquí del Pueblo Diaguita, en este año incorporamos de manera estable a dos mujeres Estela Torres del Pueblo Lule, maestra, y a Ivana Carrazana Historiadora originaria, en reemplazo de Rosita Zanche Pueblo Tastil, y de Analia Pérez del Pueblo Diaguita, quienes debido a razones laborales y personales no pudieron acompañarnos más, en esta tarea que la hacemos a pulmón. Como siempre nuestros colaboradores fueron muchísimos entre ellos Jacinto Aceri Ava Guarani de Oran, Danny Tastil de los Alisos, Fernando Arenas, Martin Guantay, Marisa Civila de Los Toldos Santa Victoria, Mauricio Silva Mapuche de Malargüe Mendoza, Esteban Alankay CPI Diaguita, Miguel Gil Onta del Pueblo Huarpe de San Juan, entre otros espero no olvidarme de ninguno.


XL:¿Qué valoración personal haces de estos 4 años de radio?

DT: Bien, valoro mucho el sacrificio de nuestros compañeros, todo a pulmón es difícil, arrancamos por convicción y por decisión política. Fuimos haciéndonos sobre la marcha, nunca tuvimos miedo al ridículo porque sabíamos que nuestra causa es justa y llevamos la voz de nuestros abuelos y de los Pueblos a toda la sociedad más allá que hallan noticieros es diferente la perspectiva que tenemos los hermanos.
Sabemos que nunca ganaremos un premio por lo que hacemos ya que vamos contra un sistema de dominación histórico de un sector reducido de la sociedad, pero que tiene por lo menos en Salta el monopolio de la administración pública del estado y de la justicia especialmente. Pero nos sentimos gratificados con el reconocimiento de los hermanos cuando visitamos una  Comunidad.


XL:¿Cuál es tu mensaje a la sociedad?

DT: Somos indios haciendo radio…jajá (se ríe) en realidad somos diaguitas, Guaraníes, Lules haciendo radio de eso se trata de participar de esta sociedad pero con identidad, en un estado de derecho debemos hacer respetar las leyes que nos igualan ante la ley. Porque una sociedad más justa no es una con menos pobres, sino que es  una sociedad con un profundo respeto por la dignidad del género humano.

XL:      XL:Gracias por la entrevista 

DT: Gracias a vos

viernes, 20 de diciembre de 2013

AGUA PARA PILETAS SI PARA LOS LULES NO!!!






Praderas de San Lorenzo
En su sitio de Facebook se difunde sin ponerse colorado en las construcciones de Piletas, y un croquis de urbanización donde se contaran con excelentes servicios!!! entre ellos canchas de futbol y más piscinas.
La armonía de la publicidad inmobiliaria, contrata con la realidad detrás del alambrado que separa el territorio comunitario y el predio de los barrios privados. Puede verse en los croquis de las futuras urbanizaciones que se ha alambrado el Rio Potrero Grande violando la línea de ribera.
Se constatado que camiones extraen áridos de la margen del rio dentro del territorio del Pueblo Lule, para introducirlo en los barrios privados. Esto ha puesto en alerta a todos los hermanos y muy indignados debido a que se les prohíbe  la extracción de áridos.




Lamentablemente la Comunidad Lules atraviesa otra realidad para que esta gente goze de buenos servicios de otra argentina. Mientras en La Ciudad de Salta incluso muchos barrios carecen de agua estos vecinos cuentan con la canchita regada, con la piscina llena.

Indignación

Por defender los derechos que se expresan claramente en la legislación indígena y la Constitución Nacional, han sido  denunciados los hermanos Félix Corimayo, y Fermín Tolaba, por presuntas amenazas y coacción siendo tales falsas denuncias.

La única verdad es la realidad

Así sentenciaba el General, para cerrar algunas sentencias irrefutables, en este caso es mas que irrefutable indefendible, la indignación crece en cada reunión donde se proyectan las imágenes de lo que se hace con el agua que se extrae de territorio indígena.

 

domingo, 8 de diciembre de 2013

Los campos de concentración de la “conquista del desierto”

Los sobrevivientes de la llamada “Conquista del Desierto” fueron “civilizadamente” trasladados, caminando encadenados 1.400 kilómetros, desde los confines cordilleranos hacia los puertos atlánticos.

A mitad de camino se montó un enorme campo de concentración en las cercanías de Valcheta (Río Negro). El colono Galés John Daniel Evans, recordaba así aquel siniestro lugar: “En esa reducción creo que se encontraba la mayoría de los indios de la Patagonia. (…) Estaban cercados por alambre tejido de gran altura, en ese patio los indios deambulaban, trataban de reconocernos, ellos sabían que éramos galeses del Valle del Chubut. Algunos aferrados del alambre con sus grandes manos huesudas y resecas por el viento, intentaban hacerse entender hablando un poco de castellano y un poco de galés: poco bara chiñor, poco bara chiñor” (un poco de pan señor).” 1
La historia oral, la que sobrevive a todas las inquisiciones, incluyendo a la autodenominada “historia oficial” recuerda en su lenguaje: “La forma que lo arriaban…uno si se cansaba por ahí, de a pie todo, se cansaba lo sacaban el sable lo cortaban en lo garrone. La gente que se cansaba y…iba de a pie. Ahí quedaba nomá, vivo, desgarronado, cortado. Y eso claro… muy triste, muy largo tamién… Hay que tener corazón porque… casi prefiero no contarlo porque é muy triste. Muy triste esto dotor, Yo me recuerdo bien por lo que contaba mi pobre viejo paz descanse. Mi papa; en la forma que ellos trataban. Dice que un primo d”él cansó, no pudo caminar más, y entonces agarraron lo estiraron las dos pierna y uno lo capó igual que un animal. Y todo eso… a mi me … casi no tengo coraje de contarla. Es historia… es una cosa muy vieja, nadie la va a contar tampoco, no?...único yo que voy quedando … conocé… Dios grande será… porque yo escuché hablar mi pagre, comersar…porque mi pagre anduvo mucho… (…).” 2
De allí partían los sobrevivientes en una larga y penosa travesía, cargada de horror para personas que desconocían el mar, el barco y los mareos, hacia el puerto de Buenos Aires. Los niños se aferraban a sus madres, que no tenían explicaciones para darles ante tanta barbarie.
Un grupo selecto de hombres, mujeres y niños prisioneros fue obligado a desfilar encadenado por las calles de Buenos Aires rumbo al puerto. Para evitar el escarnio, un grupo de militantes anarquistas irrumpió en el desfile al grito de “dignos”, “los bárbaros son los que les pusieron cadenas”, prorrumpieron en un emocionado aplauso a los prisioneros que logró opacar el clima festivo y “patriótico” que se le quería imponer a aquel siniestro y vergonzoso “desfile de la victoria”.
Desde el puerto los vencidos fueron trasladados al campo de concentración montado en la isla Martín García. Desde allí fueron embarcados nuevamente y “depositados” en el Hotel de Inmigrantes, donde la clase dirigente de la época se dispuso a repartirse el botín, según lo cuenta el diario El Nacional que titulaba “Entrega de indios”: “Los miércoles y los viernes se efectuará la entrega de indios y chinas a las familias de esta ciudad, por medio de la Sociedad de Beneficencia”.
Se había tornado un paseo “francamente divertido” para las damas de la “alta sociedad”, voluntaria y eternamente desocupadas, darse una vueltita los miércoles y los viernes por el Hotel a buscar niños para regalar y mucamas, cocineras y todo tipo de servidumbre para explotar.
En otro articulo, el mismo diario El Nacional describía así la barbarie de las “damas” de “beneficencia”, encargadas de beneficiarse con el reparto de seres humanos como sirvientes, quitándoles sus hijos a las madres y destrozando familias: “La desesperación, el llanto no cesa. Se les quita a las madres sus hijos para en su presencia regalarlos, a pesar de los gritos, los alaridos y las súplicas que hincadas y con los brazos al cielo dirigen las mujeres indias. En aquel marco humano unos se tapan la cara, otros miran resignadamente al suelo, la madre aprieta contra su seno al hijo de sus entrañas, el padre se cruza por delante para defender a su familia”.
Los promotores de la civilización, la tradición, la familia y la propiedad, habiendo despojado a estas gentes de su tradición y sus propiedades, ahora iban por sus familias. A los hombres se los mandaba al norte como mano de obra esclava para trabajar en los obrajes madereros o azucareros.
Dice el Padre Birot, cura de Martín García: “El indio siente muchísimo cuando lo separan de sus hijos, de su mujer; porque en la pampa todos los sentimientos de su corazón están concentrados en la vida de familia.”
Se habían cumplido los objetivos militares, había llegado el momento de la repartija del patrimonio nacional.
La ley de remate público del 3 de diciembre de 1882 otorgó 5.473.033 de hectáreas a los especuladores. Otra ley, la 1552 llamada con el irónico nombre de “derechos posesorios”, adjudicó 820.305 hectáreas a 150 propietarios. La ley de “premios militares” del 5 de septiembre de 1885, entregó a 541 oficiales superiores del Ejército Argentino 4.679.510 hectáreas en las actuales provincias de La Pampa, Río Negro, Neuquén, Chubut y Tierra del Fuego. La cereza de la torta llegó en 1887: una ley especial del Congreso de la Nación premió al general Roca con otras 15.000 hectáreas.
Si hacemos números, tendremos este balance: La llamada “conquista del desierto” sirvió para que entre 1876 y 1903, es decir, en 27 años, el Estado regalase o vendiese por moneditas 41.787.023 hectáreas a 1.843 terratenientes vinculados estrechamente por lazos económicos y/o familiares a los diferentes gobiernos que se sucedieron en aquel período.
Desde luego, los que pusieron el cuerpo, los soldados, no obtuvieron nada en el reparto. Como se lamentaba uno de ellos, “¡Pobres y buenos milicos! Habían conquistado veinte mil leguas de territorio, y más tarde, cuando esa inmensa riqueza hubo pasado a manos del especulador que la adquirió sin mayor esfuerzo ni trabajo, muchos de ellos no hallaron –siquiera en el estercolero del hospital– rincón mezquino en que exhalar el último aliento de una vida de heroísmo, de abnegación y de verdadero patriotismo.” 3
Los verdaderos dueños de aquellas tierras, de las que fueron salvajemente despojados, recibieron a modo de limosna lo siguiente: Namuncurá y su gente, 6 leguas de tierra. Los caciques Pichihuinca y Trapailaf, 6 leguas. Sayhueque, 12 leguas. En total, 24 leguas de tierra en zonas estériles y aisladas.
Ya nada sería como antes en los territorios “conquistados”; no había que dejar rastros de la presencia de los “salvajes”. Como recuerda Osvaldo Bayer, “Los nombres poéticos que los habitantes originarios pusieron a montañas, lagos y valles fueron cambiados por nombres de generales y de burócratas del gobierno de Buenos Aires. Uno de los lagos más hermosos de la Patagonia que llevaba el nombre en tehuelche de ‘el ojo de Dios’ fue reemplazado por el Gutiérrez, un burócrata del ministerio del Interior que pagaba los sueldos a los militares. Y en Tierra del Fuego, el lago llamado ‘Descanso del horizonte’, pasó a llamarse ‘Monseñor Fagnano’, en honor del cura que acompañó a las tropas con la cruz.”
Referencias:
1 Delrio, Walter; “Sabina llorar cuando contaban. Campos de concentración y torturas en la Patagonia.” Ponencia presentada en la Jornada: “Políticas genocidas del Estado argentinos: Campaña del Desierto y Guerra de la Triple Alianza”, Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Poder Autónomo, Buenos Aires, 9 de Mayo de 2005. Citado por Fabiana Nahuelquir en “Relatos del traslado forzoso en pos del sometimiento indígena a fines de la conquista al desierto”, publicado en  www.elhistoriador.com.ar
2 Testimonio recogido en Perea Enrique; “…Y Félix Manquel dijo”. Fundación Ameghino, Viedma, 1989. Citado por Fabiana Nahuelquir en “Relatos del traslado forzoso en pos del sometimiento indígena a fines de la conquista al desierto”, publicado en  www.elhistoriador.com.ar
3 Prado, obra citada.
Fuente: www.elhistoriador.com.ar

No hubo acuerdo por las tierras y podrían ser desalojada 30 familias Weenhayek

PROVINCIA DE SALTA:
LUEGO DE MANTENER TRES AUDIENCIAS DE MEDIACIÓN ENTRE LA COMUNIDAD GALLARDO Y EL TERRATENIENTE ORTEGA LA SITUACION SE AGRABA
Las comunidades Wichí, Guaraní y Toba del lugar se suman también al reclamo.
 
   Imagen de la última audiencia del día jueves 28 de noviembre  
 
Por: TATA OGUE MBAE INFO

La comunidad Gallardo, del pueblo originario Weenhayek, de la localidad de Embarcación, situado al norte de la provincia de Salta, decidió no aceptar la reducción que pretende llevar adelante el  terrateniente Jorge Ortega Velarde, quién en fecha 01 de octubre intentó desalojar con sus empleados a fuerza de intimidaciones, amenazas e intentos de destrucción de las viviendas de las 30 familias que habitan históricamente en el lugar.

Tras los atropellos la autoridad comunitaria, Benito Rodríguez, interpuso la correspondiente denuncia en la Comisaría 43 de la ciudad de Embarcación; mientras que el terrateniente había obrado posterior a la denuncia penal que realizó a la comunidad por una supuesta usurpación. Esta situación llevó a las parte hasta la instancia de mediación en el que ambos se presentaron en fecha 22 de octubre (pre mediación), 06, 11 y 23 de noviembre con sus respectivos abogados.
 
 
 
Audiencia de fecha 11 de noviembre en Tartagal
 
La decisión fue tomada este fin de semana en asamblea  comunitaria tras haber intentado llegar a un acuerdo en las tres Audiencia de Mediación (2 en Tartagal y 1 en Embarcación) entre las partes, los que finalmente no prosperaron. La comunidad considera que para poder subsistir o desarrollarse es necesario continuar haciendo uso del territorio ancestral de alrededor de 600 hectáreas y no en las 4 que pretende reducir el terrateniente Ortega.
Actualmente las familias Weenhayek se encuentran dispersos en el territorio en disputa y colinda con la comunidad originaria “El Cristo Arriba”, situado sobre la loma y habitada por descendientes Wichí y Toba; mientras que al pie se encuentra la comunidad Guaraní- Wichí “El Cristo Abajo”; ambas quedan al frente de la terminal de ómnibus de la localidad de Embarcación, por donde atraviesa además la Ruta Nacional 34.
Los miembros de la comunidad Gallardo, a pesar de la falta de agua, luz y demás servicios básicos, cultivan, pastorean animales domésticos (chivas y gallinas) y extraen varillas y palos del territorio para las artesanías, los cuales significan un magro ingreso económico para la subsistencia diaria. En el lugar, a raíz de la extracción de madera y la tala de árboles por parte de aserraderos de la ciudad, se produce una constante erosión de las tierras de la loma creando barrancos y zanjones en el que se pretende reubicar a las familias.

La propuesta de Ortega, quién dice ser el titular registral de las tierras de las lomas, fue rechazada no solo por la reducción del hábitat, sino también porque las mencionadas tierras son los que se encuentran a continuación de la comunidad “El Cristo Arriba”, donde el suelo se erosionó creando un zanjón de más de 10 metros de profundidad por 20 de ancho que en cada lluvia se agranda y amenaza a los vecinos. En este lugar se pretende rellenar para acondicionarlo.
 
El terrateniente Jorge Ortega señalando el lugar que quiere ubicar a las familias
 
En la última audiencia de mediación, llevada a cabo en Embarcación este 28 de noviembre, además de la comunidad Gallardo, se presentaron también los de El Cristo Arriba y El Cristo Abajo para apoyar la demanda de las familias Weenhayek; además, expresaron su desacuerdo por la obra que quiere el terrateniente realizar en el zanjón. “Si Ortega rellena ese zanjón nosotros vamos a quedar tapado con lodo cuando llueva”, mencionó la referente guaraní de El Cristo Abajo.
Además, los habitantes del lugar se mostraron molestos con el terrateniente por haber alambrado recientemente el acceso al territorio en disputa, impidiendo que accedan a sacar las materias primas para las artesanías, leñas y pastoreo de sus animales.